jueves, 22 de enero de 2015

LA VIDA ETERNA (ESCATOLOGÍA)


LA RESURECCCIÓN DE LA CARNE (CEC 988 - 1019) Significado teológico del término "carne". Significado de la expresión "resurrección de la carne". La muerte como separación del cuerpo y del alma y la resurrección. Significado de la expresión "morir en Cristo Jesús".

LA VIDA ETERNA (CEC 1020 - 1065) Definición de la vida eterna. El juicio particular. Definición de cielo, purgatorio e infierno. Conciliación del infierno con la bondad de Dios. El juicio final. Los cielos nuevos y la tierra nueva. Significado del término "Amén".

ESCATOLOGÍA

Noción de escatología: Es el estudio teológico de las realidades últimas, posteriores a la vida terrena del hombre y a la historia humana
A) Escatología general: Que trata de los eventos que acontecerán al final de la historia: Parusía, Resurrección, juicio final y Vida Eterna.
B) Escatología individual: Que trata de los misterios que aguardan al hombre al final de su vida personal: Muerte, juicio particular, vida eterna…

ESCATOLOGÍA INDIVIDUAL

Estado de viador o peregrinación: Periodo de vida que va desde la concepción hasta la muerte al mundo. Es el estado durante el cual el hombre puede merecer o desmerecer, decidir a favor o en contra de la comunión con Dios (Gal 6, 10).

Muerte: es la consecuencia del pecado original. Según la revelación, no habría existido en el orden de la creación (Gen 3, 19).
Juicio particular: tiene lugar inmediatamente después de la muerte. Fallo en que se decide la suerte eterna del fallecido en relación con su fe y sus obras. Esta retribución consiste en el acceso a la felicidad del cielo, inmediatamente o después de una adecuada purificación, o bien de la condenación eterna al infierno (Lc 16, 26).
Purgatorio: El purgatorio es el estado de los que mueren en amistad con Dios pero, aunque están seguros de su salvación eterna, necesitan aún de purificación para entrar en la eterna bienaventuranza. En virtud de la comunión de los santos, los fieles que peregrinan aún en la tierra pueden ayudar a las almas del purgatorio ofreciendo distintas obras buenas por ellos (Mt 12, 32).
Cielo: Por cielo se entiende el lugar y estado de felicidad suprema y definitiva. Todos aquellos que mueren en gracia de Dios y no tienen necesidad de posterior purificación, son reunidos en torno a Jesús, a María, a los ángeles y a los santos, formando así la Iglesia del cielo, donde ven a Dios «cara a cara» (1 Co 13, 12), viven en comunión de amor con la Santísima Trinidad e interceden por nosotros (Jn 14, 2).
Infierno: condenación eterna de todos aquellos que mueren, por libre elección, en pecado mortal. La pena principal del infierno consiste en la separación eterna de Dios, en quien únicamente encuentra el hombre la vida y la felicidad para las que ha sido creado y a las que aspira. Cristo mismo expresa esta realidad muchas veces. Dios quiere que «todos lleguen a la conversión» (2 P 3, 9), pero, habiendo creado al hombre libre y responsable, respeta sus decisiones. Por tanto, es el hombre mismo quien, con plena autonomía, se excluye voluntariamente de la comunión con Dios si, en el momento de la propia muerte, persiste en el pecado mortal, rechazando el amor misericordioso de Dios (Mt 25, 41).

ESCATOLOGÍA GENERAL O UNIVERSAL
Parusía (presencia, llegada): es la segunda venida de Cristo al final de los tiempos para cerrar la historia humana. En ella tendrá lugar la resurrección de los muertos, el juicio final, y la formación de los cielos y la tierra nueva (Mt 28, 20). 
Resurrección de los muertos: transformación del actual cuerpo mortal, a imagen de Cristo resucitado, en ordena a la vida eterna. Esta resurrección de los muertos será para todos los hombres, justos e impíos. Además de comunión plena con Cristo —y por tanto con la Trinidad—, también se dará una comunión con los otros cristianos (Lc 22, 29).
Juicio final: El juicio final (universal) consistirá en la sentencia de vida bienaventurada o de condena eterna que el Señor Jesús, retornando como juez de vivos y muertos, emitirá respecto de los justos y de los pecadores, reunidos todos juntos delante de sí. Tras del juicio final, el cuerpo resucitado participará de la retribución que el alma ha recibido en el juicio particular. El juicio final sucederá al fin del mundo, del que sólo Dios conoce el día y la hora (Mt 16, 27).
Cielos nuevos y tierra nueva: Después del juicio final, el universo entero, liberado de la esclavitud de la corrupción, participará de la gloria de Cristo. Así se alcanzará la plenitud del Reino de Dios. Dios será entonces todo en todos, en la vida eterna (2 Pe 3, 13).

Luz de la gloria: es una ayuda o capacitación dada por Dios a las creaturas para que puedan ver a su creador y gozar de él -acciones que exceden infinitamente su capacidad-. Es un fortalecimiento y elevación sobrenatural del entendimiento humano que da la posibilidad de conocer a Dios (Ap. 22, 23).
La visión intuitiva de Dios: es el tipo de conocimiento de Dios realizado en el Cielo, que será de un modo inmediato, claro, directo y abierto, tal como es en sí misma la Esencia Divina. Este tipo de conocimiento puede contrastarse con los modos imperfectos que conocemos en esta vida: un conocimiento por la fe, el conocimiento analógico, el conocimiento por raciocinio (Mt 5, 8).

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